Review: Las funciones de los juegos de rol, de Sarah L. Bowman (2010)

Sarah Lynne Bowman. The Functions of Role-Playing Games: How Participants Create Community, Solve Problems, and Explore Identity. Jefferson, NC: McFarland, 2010.

“Las funciones de los juegos de rol: cómo los participantes crean comunidad, resuelven problemas y exploran la identidad” de Sarah Bowman es una profunda exploración sobre el impacto de los juegos de rol. Este estudio analiza cómo los jugadores de juegos de rol forman comunidades significativas, resuelven problemas en el juego y expresan diversas facetas de su identidad.

Bowman sostiene que los juegos de rol «ofrecen una salida saludable y útil para la creatividad, la autoexpresión, la conexión comunitaria y el desarrollo de habilidades importantes a lo largo del tiempo». A través de estos juegos, los participantes exploran su identidad y descubren su potencial, además de ofrecer un recurso valioso y poco explotado en la educación. Este enfoque muestra que los juegos de rol abarcan un amplio rango de prácticas culturales y educativas.

La autora estructura el libro en varias secciones: primero, explora la evolución histórica del juego (capítulo 1); luego, conecta los juegos de rol con otras formas de juego comunitario como el teatro de improvisación y el rol terapéutico (capítulo 2). A continuación, describe cómo estos juegos fomentan la comunidad (capítulo 3), desarrollan habilidades interpersonales (capítulo 4), ayudan a resolver problemas (capítulo 5) y facilitan la exploración de la identidad (capítulos 6 y 7), brindando una exhaustiva cantidad de ejemplos para cada caso.

Bowman concluye con un modelo de nueve tipos de personajes de rol: el «Yo doppelgänger», el «Yo vacío», el «Yo aumentado», el «Yo fragmentado», el «Yo reprimido», el «Yo idealizado», el «Yo oposicionista», el «Yo experimental» y el «Yo tabú». Cada uno representa facetas distintas de la identidad que los jugadores exploran. Por ejemplo, el «Yo tabú» permite a los jugadores expresar conductas prohibidas en la vida cotidiana, mientras que el «Yo reprimido» se conecta con el “niño interior” de cada jugador, permitiendo la expresión de una versión más inocente de sí mismos.

El libro es, en general, una revisión extensa de la literatura, que finaliza con una propuesta de clasificación de identidades en juegos de rol. Para quienes se interesan en el tema, Bowman ofrece un enfoque convincente sobre las motivaciones de los jugadores al interpretar estos “Yoes” alternativos. A lo largo del texto, sugiere que la creación de un «personaje de rol» es el desarrollo de identidades alternativas con valor también fuera del juego.

Esta obra defiende la legitimidad académica de los juegos de rol narrativos. Bowman argumenta que estos juegos son fascinantes, valiosos y merecen ser estudiados, invitando a los académicos a investigar cómo las narrativas, las reglas y las estructuras de juego interactúan para crear significado para los jugadores. Su texto promete ser un catalizador para estudios más profundos en este campo.